La diabetes canina y felina

En este artículo vamos a describir una de las enfermedades endocrinas mas frecuentes en nuestros perros y gatos, la diabetes mellitus, caracteriza por el aumento crónico de glucosa (azúcar) en la sangre.

Se estima que 1 de cada 100 perros y 1 de cada 300 gatos tiene diabetes mellitus, debido a esta alta prevalencia representa un verdadero peligro para la salud de nuestros amigos de cuatro patas, por lo que es muy recomendable conocerla y saber sus principales síntomas para permitir un diagnostico precoz.

 

 

Qué es la diabetes.

Es una enfermedad crónica causada por la incapacidad del cuerpo (páncreas) de producir o usar adecuadamente la insulina, lo que dará lugar a que nuestro animal tenga de forma crónica niveles elevados de glucosa en sangre desencadenando los síntomas clínicos de la enfermedad.

            – La insulina: es una hormona producida en el páncreas que permite la utilización de la glucosa por parte de la células, posibilitando que éstas puedan coger el azúcar de la sangre y usarlo para producir energía.

 

 

Tipos de diabetes canina.

            – Diabetes Tipo I o insulinodependiente: aparece cuando el páncreas no es capaz de producir insulina dando lugar a un déficit parcial o total, siendo el tipo mas común en caninos.

            – Diabetes Tipo II o no insulinorresistente: es mas frecuente en felinos y se debe a una resistencia adquirida del organismo que dificulta o impide la utilización de insulina por parte de las células.

 

Factores predisponentes:

  • En perros: los individuos de mediana o avanzada edad son mas propensos a desarrollar diabetes, además las hembras y sobretodo las no esterilizadas todavía presentan un riesgo mayor. Existen determinadas razas predispuestas como; caniche, pinscher, samoyedo, teckel, Alaska malamute, schnauzer, chow-chow, Beagle, dobernan y Golden retriewer
 
  • En gatos: esta enfermedad es mas frecuente en machos, principalmente castrados y además, la obesidad también contribuye a elevar significativamente el riesgo. Otros aspectos como la inactividad y factores genéticos (raza Burmés) también son reconocidos.

Síntomas de la diabetes.

 

El aumento marcado y sostenido de los niveles de glucosa en sangre es el responsable de los principales síntomas clínicos, entre los que destacan:

  • Poliuria: hacen mucha cantidad de pipi.
  • Polidipsia: aumento de la ingesta de agua.
  • Polifagia: son animales con mucho apetito.
  • Pérdida de peso: a pesar de comer mas de lo normal.
  • Letargia: algunos animales presentan debilidad y disminución de la actividad.

Estos síntomas pueden darse también en otras enfermedades y pueden variar dependiendo de la fase de la enfermedad, por ello, cuando detectéis alguno de estos signos es necesario consultarlo con vuestro veterinario.

Complicaciones de la diabetes mellitus.

Los problemas a largo plazo son resultado de la hiperglucemia crónica, por ello el control óptimo de los niveles de glucosa en sangre ayuda a minimizar el riesgo de complicaciones, siendo las mas habituales:

            – Cataratas: es la complicación mas común, consiste en que el cristalino se vuelve opaco causando perdida parcial o total de visión. Es frecuente que sean bilaterales y en algunos animales se desarrollan muy rápidamente. 

               – Cetoacidosis diabética: representa una urgencia que requiere la hospitalización inmediata del paciente y se debe a unos niveles extremadamente altos de glucosa en sangre.

            – Hipoglucemia: es otra de la complicaciones y podría ser causa de una exceso de insulina que da lugar a niveles muy bajos de glucosa en sangre lo cual puede dejar al cerebro sin energía y provocar pérdida de consciencia.

 

Señales de urgencia:

Si tiene un animal diabético es importante que esté preparado para reconocer alguno de los siguiente síntomas y ponerse inmediatamente en contacto con su veterinario.

  • Sed excesiva durante más de 3 días
  • Micción excesiva o inadecuada durante más de 3 días
  • Reducción o pérdida del apetito
  • Debilidad, depresión o ataques de tipo epiléptico.
  • Signos digestivos (vómitos, diarrea, estreñimiento…)
  • Signos de infección de orina, como pueden ser; mear poca cantidad frecuentemente, ver sangre en el pipi, dificultad para orinar…

Diagnóstico:

Si sospecháis que vuestro animal pueda sufrir diabetes mellitus es importante acudir a vuestro veterinario. En clínica veterinaria el paseo, una vez realizado un examen clínico completo, si es compatible con dicha enfermedad os recomendaremos algunas pruebas medicas con el objetivo de confirmar el diagnóstico:


            – Hemograma y analítica sanguínea básica: lo cuál nos permitirá detectar cambios secundarios al aumento continuado de azúcar en sangre, así como cualquier otra condición relevante.

 
            – Análisis de orina: muy importante, pues es parte vital del diagnóstico, ya que si un animal sufre diabetes habrá azúcar en la orina (glucosuria).


 

Tratamiento de la diabetes.

 

Un perro diabético, en la mayoría de los casos, va a necesitar tratamiento con insulina de por vida ya que el páncreas no va a volver a sintetizarla, sin embargo, en los gatos existe la posibilidad de que la enfermedad sea reversible.

Una vez estabilizada la diabetes, el paciente puede tener una calidad de vida similar a la de un individuo sano, para ello, es necesaria la comunicación adecuada entre propietario y veterinario, además de controles periódicos.

El tratamiento de una animal diabético se fundamenta en tres medidas principales; insulina, dieta y ejercicio.

 

A-. Insulina.

Cada animales tendrá unas necesidades distintas, por ello, tu veterinario adaptará el protocolo a cada caso individual a fin de mantener el mejor estado de salud de nuestro fiel amigo.

Para alcanzar un buen control son necesarios ajustes periódicos en base a la sintomatología y los análisis periódicos, en algunos individuos puede ser necesario la realización de una curva de glucosa para ajustar adecuadamente la dosis.

 

Protocolo de inyección:

            1-. Mezclar suavemente la insulina.

            2-. Cargar la jeringa hasta su dosis.

            3-. Eliminar el aire con pequeños golpes en la jeringa con el dedo.

            4-. Estirar suavemente la piel del perro hacia arriba.

            5-. Colocar la aguja con una inclinación de unos 45º en el pliegue y atravesar la piel.

            6-. Inyectar la insulina

            7-. Retire la aguja y masajee suavemente la zona.

Conservación:

La insulina debe almacenarse siempre en posición vertical en la nevera (no congelarla) y antes de su uso se debe girar el vial suavemente unas 10 veces hasta conseguir una mezcla correcta de la insulina.

 

B-. Alimentación.

Es otro de los pilares básicos a la hora de controlar esta enfermedad. Lo ideal es que sea la misma dieta cada día y se administre siempre a la misma hora, tratando de evitar golosinas y picoteos a deshoras. Esto no significa que no pueda dar premios a su amigo, pero hable con su veterinario para que proporcione los adecuados.

La dieta ideal para un animales diabético debe contener poca grasa, ser rica en fibra y tener un contenido alto en carbohidratos complejos como el almidón pues éstos favorecen que la glucosa se libere lentamente evitando picos de glucemia.

 

C-. Ejercicio.

Realizar un ejercicio regular, moderado y frecuente es tan importante para animales diabéticos como para los sanos. La actividad física hace que se consuma energía evitando la hiperglucemia, además, el aumento del flujo sanguíneo producido por el ejercicio puede mejorar la absorción de insulina.

 

D-. Otra medidas:

               – Esterilización en hembras: en perros decíamos que la diabetes es para siempre, a excepción, de cuando ésta se desarrolla en una hembra sin castrar a consecuencia del celo y se esteriliza rápidamente, situación que puede resultar en la remisión de la enfermedad.

Además de esto, la esterilización ejerce un efecto protector en cuanto al riesgo de desarrollar la enfermedad ya que frenamos la producción de progesterona, hormona que ejerce un efecto antagonista al de la acción de la insulina favoreciendo la aparición de diabetes

 

            – Control del peso: una buena condición corporal es esencial para mantener un control adecuado de esta enfermedad. En animales con sobrepeso u obesos resulta primordial mejorar la condición corporal para manejar la enfermedad.

Además, la reducción del peso nos va a aportar otras muchas ventajas pues ya se sabe que el sobrepeso y la obesidad juegan un papel crucial en el desarrollo de algunos problemas, por ello, os dejamos el enlace a un artículo de nuestra web https://veterinariaelpaseo.com/sobrepeso-y-obesidad-en-perros-y-gatos que hace referencia a este tema.

 

En clínica veterinaria el paseo apostamos por la medicina preventiva, y la esterilización ha demostrado ser un arma contra la diabetes canina, del mismo modo también va a aportar otros muchos beneficios que estaremos encantados de explicarles.

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