Urgencias veterinarias más frecuentes

A ninguno nos gusta pensar en la posibilidad de que nuestro fiel compañero sufra una urgencia veterinaria, pero la realidad es que todos tienen riesgo de sufrirla en algún momento de su vida.

Por este motivo, queremos dar unas pinceladas para llegar a comprender que es una urgencia veterinaria y como podemos responder de forma adecuada, para ello hemos pensado hacer un resumen de las urgencias veterinarias más frecuentes en nuestros perros y gatos a fin de que puedas detectarlas a tiempo.

Siempre que tu animal de compañía manifieste un comportamiento inusual es conveniente consultar con tu veterinario, quien te podrá informar si tu fiel amigo presenta un problema urgente o no, no obstante, existen una serie de síntomas que nos deben alertar como por ejemplo;

  • Hemorragia externa abundante
  • Dificultad para respirar
  • Pérdida de consciencia
  • Convulsiones
  • Hinchazón de alguna parte corporal
  • Problemas oculares…
 
 

1-. Síndrome dilatación/torsión gástrica.

Este problema constituye una de las urgencias más graves y potencialmente mortal en perros, sobretodo de tallas grandes y gigantes y se caracteriza por una dilatación y/o torsión del estómago dando lugar a un cuadro clínico grave y complejo.

Inicialmente el animal puede presentar intranquilidad, en ocasiones después de comer o beber abundantemente, para posteriormente comenzar a presentar hinchazón del abdomen, dolor, intentos por vomitar, babeo excesivo, aumento de la frecuencia cardiaca y/o respiratoria…

Si sospechas de este síndrome es primordial que acudas a tu veterinario ya que el pronóstico empeora rápidamente cuanto más se posponga el diagnóstico y su tratamiento correspondiente.



2-. Intoxicación y/o envenenamiento.

Dentro de las intoxicaciones más frecuentes destaca la ingestión de matarratas (rodenticidas), los cuales actúan inhibiendo la acción de la vitamina K. La gravedad del envenenamiento dependerá de la cantidad ingerida y de la biodisponibilidad de vitamina K en el momento de la ingestión, así como de su metabolismo.

Los primeros signos pueden aparecer dias después de la ingesta y se caracterizan principalmente por trastornos de la coagulación, sangrados, anemia, debilidad, pequeños hematomas (petequias y equimosis) a nivel cutáneo y de las mucosas…

En este caso, es importante identificar el tipo de rodenticida para que tu veterinario pueda instaurar el tratamiento mas preciso y efectivo. También hay que tener presente que existe la posibilidad de intoxicación indirecta al ingerir algún roedor que previamente haya comido dicho veneno.

Otra intoxicación frecuente se produce cuando nuestro amigo de cuatro patas ingiere algún alimento que para nosotros es saludable (ajos, cebollas, nueces…) pero que para ellos pueden tener consecuencias graves, en este punto no vamos a extendernos mucho y os invitamos a leer el artículo referente a intoxicaciones alimentarias publicado anteriormente en nuestro blog, donde se detallan estos problemas con más exactitud.

https://veterinariaelpaseo.com/alimentos-toxicos-para-perros



3-. Problemas neurológicos (Convulsiones).

Los problemas neurológicos pueden tener una amplia variedad de síntomas, pero alguno de los que nos deben alertar rápidamente son; desorientación, incoordinación, colapso, estado de consciencia alterado, dificultad para caminar y sobretodo las convulsiones.

La causa más frecuente de convulsiones en perros es la epilepsia. En este sentido indicar que no todas las convulsiones son urgencias. Si es la primera vez que observas este problema en tu perro o gato es recomendable que informes a tu veterinario, pero si tu animal ya está diagnosticado, en ese caso sería motivo para consultar con tu veterinario si cumple alguno de los siguientes requisitos:

  • El animal sufre múltiples ataques en un periodo de 24 horas.
  • Si los ataques duran más de 5 minutos.
  • Si tiene varios ataques sin recuperación de consciencia entre ellos.
 
 

4-.  Traumatismos.

En este punto podemos englobar una amplia lista de problemas que pueden requerir atención urgente ya que en ocasiones es difícil valorar la gravedad del traumatismo interno, por lo que se recomienda llevar a tu amigo lo más rápido posible a su veterinario.


4.1-. Atropellos:

Representan una de las urgencias veterinarias más frecuentes. Los problemas derivados de estos accidentes son muy variados, pero hay que prestar especial atención a las hemorragias externas, las cuales es recomendable tratar de detener mediante compresión para minimizar la pérdida de sangre y por otro Hay que tratar de valorar la respiración y el color de las mucosas ante la sospecha de un colapso pulmonar (neumotórax, hernia diafragmática, contusión pulmonar, hemotorax…).


4.2-. Caídas:

Una de las urgencias más frecuentes en gatos es el denominado síndrome de gato paracaidista, que se produce tras la caída del gato desde una gran altura. Este problema suele ser más frecuente en gatos jóvenes y no castrados y es común que lleguen a la clínica con diferentes contusiones y/o fracturas óseas.


4.3-. Mordedura de otro perro:

Situación bastante desagradable tanto para el animal como para su familia y la cual normalmente también precisa de atención urgente. En el «mejor» de los casos el tratamiento puede pasar por antibióticos y analgesia, pero en ocasiones, las lesiones son muy extensas y graves, por lo que requieren sutura, cirugía, hospitalización…



5-. Dificultad respiratoria (Disnea).

En la mayoría de casos el animal tendrá una respiración débil, rápida y superficial (jadeo) que se puede acompañar con respiración con la boca abierta y/o el cuello estirado. En ocasiones, el animal puede manifestar tos y/o arcadas. Cualquiera de estos síntomas nos debe alertar y debemos buscar ayuda veterinaria urgente.

Esta dificultad respiratoria puede estar relacionada con problemas cardiacos, respiratorios, alergias, cuerpos extraños en la garganta, traumatismos… pero cualquiera de estas causas va a desembocar en dificultad grave para respirar y, por consiguiente, una situación potencialmente mortal.



6-. Dificultad y/o incapacidad para orinar.

Si notas que tu perro o gato presenta dificultad o incapacidad para hacer pipi o que esta inquieto y continuamente haciendo esfuerzos para miccionar sin conseguirlo, con o sin manifestación de dolor, debes ir a tu veterinario de forma urgente pues podría tratarse de una obstrucción urinaria.

Este problema puede afectar tanto a perro como a gatos, siendo más frecuente en machos que en hembras por la anatomía de su uretra. Del mismo modo que pasaba con las intoxicaciones alimentarias os dejamos aquí un enlace para que podáis leer el artículo del blog especifico de problemas urinarios.

https://veterinariaelpaseo.com/por-que-los-gatos-suelen-tener-problemas-urinarios



7-. Ingestión de cuerpos extraños.

Estas urgencias son mucho más habituales en cachorros, pero también puede afectar a animales adultos, siendo los principales cuerpos extraños identificados los huesos, seguido de los juguetes.

Entre los síntomas más comunes destacan el vómito, las arcadas y la salivación excesiva. En este tipo de problemas la rapidez del diagnóstico y tratamiento es esencial puesto que si el objeto está en esófago o estómago es posible su extracción por endoscopia con lo cual evitamos una cirugía y un postquirúrgico más delicado, mientras que si ya ha pasado a intestino esto puede dar lugar a obstrucciones intestinales y en la mayoría de ocasiones requieren cirugía para su extracción.



8-. Problemas durante el parto.

Estas emergencias no suelen ser tan frecuentes, pero cuando aparecen pueden ser de una elevada gravedad. Entre los síntomas que nos deben alertar de un problema durante el parto destacan:

  • Secreción vaginal de color verdoso o negruzco sin expulsión de ningún cachorro.
  • Cuando la hembra manifiesta contracciones activas y frecuentes, pero no expulsa ningún feto o han pasado más de dos horas desde la expulsión del último.
  • Si notas como un globo lleno de líquido atascado en el canal del parto.
  • Alteraciones del comportamiento como por ejemplo que esté muy aletargada.
  • Temperatura corporal elevada (> 39,5 ºC)
  • Sangrado vaginal copioso que se prolonga por más de 10 minutos.
 
 

Estas constituyen algunas de las urgencias más frecuentes en nuestros animales de compañía, con este artículo, además de proporcionaros algunas nociones básicas para poder reconocer y actuar rápidamente en caso de urgencia, también nos gustaría informaros que siempre es recomendable saber a donde puedes acudir en caso de urgencia, sobretodo cuando viajes, siendo muy interesante disponer de una lista de clínicas veterinarias con servicio de urgencias en el lugar de destino.

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